La semana pasada fui feliz en una sala de cine, casi siempre lo soy, pero esta vez más. Fui con mi sobrina Luna a la sala 1 del cine Doré. Durante este mes de septiembre no solo hay un ciclo de Brian de Palma, sino que para celebrar los 35 años del cine Doré como sede de las proyecciones de la Filmoteca Española, también comienza un ciclo de películas proyectadas en 35 mm, tal y como yo vi muchas películas antes de la revolución digital y los dcp. Las dos, tía y sobrina, íbamos a ver una película que me fascinó desde el primer día que pude disfrutarla en una sala de cine y en 35 mm en Madrid en 1994: Atrapado por su pasado (Carlito’s Way, 1993) de Brian de Palma.
El reencuentro con Carlito Brigante en pantalla grande fue genial. La sala del cine Doré estaba llena, hasta arriba. Se hicieron los honores para presentar la película y el ciclo en 35 mm (con un apasionado canto a este formato) y después de la proyección hubo un coloquio con la presencia del director de programación de la Filmoteca Española, Carlos Reviriego; el crítico de cine Alejandro G. Calvo y la crítica de cine Marta Medina al que no nos pudimos quedar hasta el final, pues al día siguiente teníamos que madrugrar, pero del que pudimos escuchar varios aspectos de la película muy interesantes y valiosos.