Compañeros mortales (The Deadly Companions, 1961) de Sam Peckinpah

companerosmortales

Compañeros mortales es el primer largometraje de Sam Peckinpah. Y como todos los primeros largometrajes esconde ya claves para reconocer a su director en su obra cinematográfica posterior. Y es bastante normal que empezara con el western, pues sus primeros trabajos televisivos iban orientados hacia este género. Precisamente Brian Keith, el actor principal de una de las series de televisión donde había trabajado como director, The Westerner, recomendó a Sam como director de esta película. Y también en este rodaje comenzó la lucha de Peckinpah contra los productores, o hacia aquellos que consideraba frenaban su espíritu creativo. En su primera película ya aparece una violencia, de momento contenida, que iría estallando a lo largo de su filmografía. Así como un tono crepuscular y desencantado… con la construcción de una historia de amor de dos personajes al margen. Personajes tan queridos por el director, que vivió en sus entrañas el desarraigo, autodestruyéndose poco a poco con el alcohol y las drogas.

Sigue leyendo