La boca de la verdad

Esta nueva sección siempre empezará con la misma primera línea

Te regalo un fotograma.

Esto es que se era una princesa perdida en Roma por elección.

Porque está harta de protocolos.

Y de máscaras.

Y quiere por un día ser una mujer de carne y hueso.

Sin responsabilidades.

Ni encorsetamientos.

Y la princesa se cruza con el periodista.

Y como es una mujer de carne y hueso…

Ambos se aman locamente.

Sin caretas.

Con intensidad porque saben que sólo son unas horas.

Y se van de paseo en Vespa.

Y visitan la boca de la verdad.

Porque entre ellos aunque esconden muchos secretos sólo hay verdad…

Y juegan.

Y ríen.

… y son felices, doblemente felices, porque saben que esa felicidad será breve.

Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.

6 comentarios en “La boca de la verdad

  1. ¿Y qué me dices de la rueda de prensa final, cuando salen el corresponsal del ABC y de La Vanguardia? Momentazo…
    Una de las mayores pruebas de la influencia del cine y de su poder de convertirse en memoria sentimental colectiva es la fila de gente que se pone siempre ante el monumento en cuestión para hacerse la fotito metiendo la mano… Sí, en la boca, también.
    Besos

  2. Por supuesto que es un momentazo que además a mí siempre me sienta mal… porque ponen a dos hombres bajitos, rechonchos y no muy agraciados entre medias de un enorme y atractivo Gregory Peck y el bohemio del fotógrafo… ejem, ejem… ¿por qué ese contraste y con esos periodistas en concreto? Tonterías mías.
    … totalmente de acuerdo con la memoria sentimental colectiva…
    ¿Cuántos paseos se habrán realizado en vespa o moto similar pensando en Vacaciones en Roma?
    Besos
    Hildy

  3. Has resumido bien de que trata Vacaciones en Roma según tengo entendido, espero verla que la tengo y con tantos filmes revolotéandome alrededor se me ha escapado y siendo semejante obra de tanta fama ya suena imperdonable, lo de recrear momentos de películas no falta seguramente, tengo un conocido que fue a Venecia atraído por su celebridad de romántica y dice que se encontró con algo muy distinto, que el olor del ambiente era insoportable y que había menos belleza de la que prodigaban, me queda la duda igual ya que todos experimentamos distinto. Eepero ver a Audrey Hepburn y Peck en dicha aventura idílica. Saludos.

    Mario.

  4. …¡¡¡Mario, qué alegría tenerte de nuevo por aquí!!! Paseé por tus Nenúfares efervescentes (soy curiosa por naturaleza, ¿a qué se debe dicho nombre? Que por otra parte me encanta…, encierra misterio). No te dejé mensaje porque soy una paleta de las nuevas tecnologías (ya sabes que como Hildy Johnson de Luna Nueva soy más de la máquina de escribir) y como no sea como anónima o con un sistema para tontos informáticos como yo… pues no sé poner comentarios… ohhh. Pero descuida que te seguiré.

    Si me das permiso también me gustaría ponerte en mi columna de la derecha en OTROS APASIONADOS CINÉFILOS.

    ¡Vacaciones en Roma es un cuento urbano que es una delicia! Roma es hermosa en la película y en la realidad. Pasearse por sus calles en compañía de Hepburn y Peck es un lujo maravilloso… y con la mirada de Wyler ya ni te cuento.

    Cuando yo he ido a Venecia me ha dejado siempre buenos recuerdos y yo sí le encontré belleza… pero es cierto que según la época los canales pueden oler peor. Y es cierto que a veces la imagen ideal que nos construimos puede no coincidir con lo que nos encontramos. Y es cierto que en determinados periodos hay un exceso de turismo… Y es cierto…

    Besos
    Hildy

  5. ¡Qué bien que te guste, Carmen!
    … son muchos los recuerdos cinéfilos que me vienen a la cabeza.
    Sí, es lo hermoso de Vacaciones en Roma… que esa felicidad va a ser breve pero recordada para siempre.
    En cierto modo es parecido a lo que ocurre en LOS PUENTES DE MADISON. A veces sólo pasas unas horas con una persona y te llenan casi toda una vida…
    Besos
    Hildy

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