Jane Wyman, ya sabes que sólo el cielo lo sabe

Casualidades, vuelvo de vacaciones y escribo sobre Sólo el cielo lo sabe, una de las películas que protagonizó Jane Wyman. A los seis días de ese texto, con 93 años, Wyman, la actriz del rostro peculiar nos deja. Sólo el cielo sabe de casualidades. 

Muchos sólo la recuerdan como la malvada Angela Channing, un personaje de una serie de televisión, Falcon Crest. Otros, como esa actriz que se convirtió en la primera esposa de Ronald Reagan. Luego, este mediocre actor que llegó a presidente de los EEUU, volvió a casarse con Nancy Reagan, un calco de Jane. 

No creo que fuera su deseo ser sólo recordada por Angela y Reagan. Lo cierto es que la Wyman aunque nunca llegó a ser una mega estrella de Hollywood cultivó una carrera de títulos para recordar.Y, sobre todo, según fue madurando su rostro de mujer americana normal, y republicana, le dio fama en forma de melodrama o show televisivo.  

Logró su primera oportunidad como actriz protagonista en un relato estremecedor sobre el alcoholismo de Billy Wilder, Días sin huellas (1945). Ella era la mujer que estaba al lado de un escritor fracasado que no lograba dejar el alcohol. Después, hizo de la amiga alegre de Cole Porter en Noche y día (1946) de Michael Curtiz. Protagonizó una de las primeras películas ecológicas en El despertar (1946) y se entregó en su papel de discapacitada en Belinda (1948). También, en los cuarenta se fue a la comedia capriana pero dirigida por Wellman en Ciudad mágica (1947) con James Stewart. 

Alfred Hitchcock se alejó de sus chicas gélidas y rubias y la dio un papel en Pánico en la escena. Después, vinieron los famosos melodramas de Douglas Sirk junto a Rock Hudson, Sólo el cielo lo sabe y Obsesión (1954). Por supuesto, hizo llorar como una mujer abnegada que cuida a niños desfavorecidos después de perder a su marido y su hijo en la Primera Guerra Mundial, No estoy sola (1951). 

No olvidemos que también protagonizó la primera versión cinematográfica de El zoo de cristal (1950) donde realizó una interpretación sensible en el universo del dramaturgo Tenesse Williams. 

Ganó un oscar por Belinda y su recreación de una muchacha sordomuda y violada.  Recibió tres nominaciones más por El despertar, Obsesión y No estoy sola. 

La Wyman nos deja…, pero la recordamos más allá de Angela y Reagan. Cuídate… sólo si tú quieres.

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