Mujeres de agua

Una mujer de agua puede ser una sirena…,

que en tierra se da cuenta del placer de tener piernas.

Pero siempre echa de menos el mar.

El agua es vital.

Lo malo es que quiere seguir para siempre a un hombre con dos piernas… pero ella es feliz con su cuerpo mitológico.

Entonces triste se pone a cantar.

Y esa canción arrulla a los marineros…, los despista y los hace morir.

Es su venganza por no poder amar.

La sirena siempre fue una mujer fatal.

 

Una mujer de agua puede ser aquella que nada en una piscina.

Allí siente los sonidos del agua.

Calma.

Y quizá nadando logre olvidar una ausencia, una muerte.

Una traición.

Ahí siente menos dolor.

Será porque el dolor flota.

 

Hay mujeres de agua tristes.

Una se equivocó de hombre.

Se equivocó de amor.

Y acabó en el fondo de un lago.

Sus cabellos se mezclaron con las algas.

 

… Una mujer de agua puede huir de las voces que oye.

Antes le calmaba ponerse a escribir.

Hasta que las voces invadieron su mente.

Un asedio.

Y sólo pudo hacerlas callar, ahogándolas.

Metiéndose poco a poco en el agua.

Quizá pronto podrá dormir…

 

Más allá una mujer de agua vestida de novia es arrastrada por la corriente.

Tumbada con su ramo verde.

Le puede la melancolía.

También la melancolía… le da fuerza.

Mujer de frío y agua.

El fin ya no le importa…

 

La mujer de agua que nada.

Pero ya no respira igual.

Que fue joven sirena que ganaba concursos.

Ya es sirena anciana.

Ella se mete en el agua…

Y con un último suspiro, logra revivir tiempos pasados.

Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons 

12 comentarios en “Mujeres de agua

  1. ¡¡Qué horror!! ¡¡»Splash»!!
    ¡¡Qué horror!! ¡¡Nicole Kidman está mejor con una nariz ganchuda postiza que con toda la mierda de plástico con la que se ha recauchutado la cara!! ¡¡Parece la prima hawaiana del muñeco de Michelín!!
    Dicho esto, ¿y Esther Williams, el besugo convertido en mujer?
    Ay, yo me quedo con la dama del lago de «Excalibur»; vaya mondadientes que se gastaba…
    Besos

  2. ¡Qué bonito repaso a las mujeres de agua cinematográficas! Me gusta esto de «mujeres de agua». Claro, yo no sé nadar y me es imposible perseguir sirenas… Una pena, francamente, porque siempre he tenido cierta tendencia a Ulises. Besos.

  3. Desde luego, yo aquí intentando ponerme seria y melancólica con mis mujeres de agua… y viene aquí mi Alfredo el de la risa perversa y me hace soltar una carcajada.

    ¡Esto no puede ser!

    ¡Esther Williams, ese recuerdo de la infancia, convertida en un besugo!

    Pero ¿esto qué es?

    Mis mujeres del agua se han quedado aún más hundidas… Pobrecillas, tratan de no escuchar tus carcajadas… porque lo mismo se salen del agua y te acompañan…

    Besos
    Hildy

    PD: necesitaba una sirena… la imagen es bonita, bonita… pero Daryl Hanna nunca se convirtió en sirena-mujer fatal. Era buenaza ella… A lo mejor no sabía cantar.

  4. Mi querido Marcos, ¡no importa lo de no saber nadar… creo que las sirenas te arrullan con su canto, te besan profundamente y te llevan por debajo del agua… Haces unos viajes increíbles a los fondos marinos con ellas, y respiras mientras te besan…! En el fondo no son tan malas… Sólo que se enamoran más de los hombres-tierra que de los amigos de Neptuno…
    Yo cuando veo a los submarinistas me río bastante… si tuvieran una sirena al lado no tendrían que llevar tanta parafernalia…

    Besos
    Hildy

  5. Disculpa, mi querida Hildy, pero estos días, un pelín difíciles, necesito dar rienda suelta al humor.
    Para compensar, te dejo una sirena «seria», aunque «de todo a cien»: Anita Ekberg en la Fontana di Trevi en «La dolce vita» canturreando eso de «Marcello, come here». No me digas tú que no es una sirena tentadora, aunque tuve que cumplir unos añitos para darme cuenta de que esas cosas grandes que tenía delante no eran flotadores por si se hundía…».
    Más besos

  6. Ay, los famosos flotadores de la Ekberg… cuántos estragos han hecho y hacen… Sí, es una sirena hermosísima… que habita en la Fontana de Trevi.

    Besos
    Hildy

    PD: Mi querido Alfredo el humor es la mejor medicina contra los días difíciles. Tú sabes mucho.

  7. Muy sensual el repaso. A mi me gusta el cazasirenas de Splash. Es un científico incomprendido…Esos de perseguirla con dos calderos de agua por pleno Manhattan es tan delirante…
    Dentro del repaso hay de todo,desde la prerafaélita hasta la escritora sublime.
    Sabes cual me inquieta,la de Lo que la verdad esconde…Esa señorita que surge de entre las aguas pidiendo venganza…¿y Jane? Menudos baños. Me encantó Hildy

  8. ¡Vaya, yo también me acuerdo de ese cazasirenas…, delirante!…

    Tienes razón con LO QUE LA VERDAD ESCONDE… entre las aguas y pidiendo venganza, ¡con lo bonitos que son los fondos marinos!, tendría que calmarse un poco.

    Y mira que recuerdo yo ahora a la pobre bañista, que nada cual sirena, en un mar inquietante sin saber que hay un tiburón hambriento cerca… ¡madre mía, cómo se queda la pobre! Vamos que yo no me meto en el agua ni un segundito cada vez que la veo y me convierto en mujer-tierra.

    Pero luego veo a Jane… y me reconcilio con el agua (aunque la mujer nos pegaba unos sustos con tanto cocodrilo cerca).

    Me gustan cada vez más estas mujeres de agua… que son muchas y nos llenan de imágenes inolvidables…

    Besos
    Hildy

  9. De todas las que has puesto me quedo con Virginia Woolf, agua para acallar las voces de su interior, sustitución de la escritura por el agua que acabará con su vida. Bonita reflexión sobre el agua y las mujeres en el cine.
    Un saludo.

    Jose.

  10. ¡Bienvenido José! Qué alegria que te pases por aquí.

    Me alegro que te haya gustado esta galería de mujeres de agua. La película de Las horas tiene muchos temas interesantes en los que indagar y ahí se encuentra esa Virginia Woolf que no encontró otra manera de acallar voces más que hundiéndose en el agua…

    Besos
    Hildy

  11. Ay, esas mujeres acuáticas, esas mujeres húmedas. La mujer está muy bien en el agua pero no siempre es así, mira en Psicosis con aquella pobrecilla que se está duchando. Pero también mira a la Ursula Andress saliendo del mar en la película James Bond contra el Dr. No chorreando agua y con ese cabello a la sirena. La joven del agua dirigida por M.Night Shyamalan…agua y más agua sobre la piel de una mujer.¡Pero qué delicioso post!

    Besos y más besos

  12. ¡Qué buenas mujeres de agua, mujeres acuáticas, que me proporcionas! Sí, recuerdo a esa joven del agua de Shyamalan. Y Ursula se convirtió en icono. Y, bueno, la pobre Janet si hubiese sabido lo que la esperaba en la ducha hubiese pasado de tanta higiene personal…

    Besos, besos y muchos más besos
    Hildy

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